La amistad y las malas hierbas.

No se si voy a aportar algo al concepto de amistad, yo creo que todo el mundo ya ha dicho todo lo que tenía que decir sobre ella pero a mí se me ocurre esta reflexión:
Conozco a mucha gente y alguno de ellos los considero mis amigos, sin embargo, algunas veces hago una revisión del porqué de esas amistades y me resulta difícil encontrar algún punto en el que se pueda seguir sosteniendo el sentimiento que yo tengo de ella.
Algunas personas siempre te presentan como su amigo, su amigo de la infancia, sin embargo a la primera oportunidad recibes un desaire, una mala contestación, una relación interesada o un posicionamiento jerárquico o económico. Es entonces cuando reflexionas sobre el verdadero contenido de esa palabra y sobre todo, sobre el verdadero contenido de tu relación con él. Siempre me surge la misma pregunta ¿Por qué soy amigo suyo?, ¿Por qué lo quiero?.............nunca encuentro respuesta, a veces pienso que es una relación de inercia, es decir, he vivido tantas cosas juntos que forma parte de mí aunque no está dentro de mí. Lo lógico sería apartarme y seguir mi camino, sin embargo, siempre vuelvo y vuelvo sabiendo que al día siguiente o dentro de dos días volverá a excluirme, a rechazarme o sencillamente a ignorarme, dentro de dos días volverá para conseguir algo y dejar claro lo listo o lo importante que es él y lo poco que te necesita.
Yo nunca sé porque las relaciones humanas son tan complejas y porque seguimos siendo amigos de personas que se empeñan todos los días en decir que son tus amigos y demostrando que no lo son. Creo que, como ya he dicho, es una cuestión de inercia y de comodidad, si el mundo de la amista fuera un jardín, estas amistades serían las malas hierbas. Supongo que la necesidad de que estén ahí es para realzar aún mas el resto de plantas, pero creo que a veces deberíamos coger un zacho y cortarlas de raíz porque a menudo perjudican al resto de las plantas y le impiden su crecimiento.