Lo prometido es deuda

Bueno pues aqui teneis otra bonita foto de la cena, realmente una buena cena no es nada sin buena gente, pues aqui tenemos una pequeña muestra de la mucha buena gente que hubo en la cena.

Una vez terminado el curso quizas sea el momento de hacer balance de situación y cuenta de pérdidas y ganancias (en el vocabulario contable), yo creo que ha sido positivo en lineas generales, sin embargo, me habreis oido decir muchas veces que para mi el baile es una diversión, sobre todo, luego una afición y a mucha distancia un reto. Antonio es un bailarin excepcional, su forma de bailar es llamativa, admirable y llena de estética, como persona es fantastica y como compañero estupendo.

Yo sin embargo tengo que reconocer que me he divertido a medias, porque iba siempre muy forzado en los pasos, estaba demasiado pendiente de acordarme del siguiente movimiento o de relacionar un paso con un nombre, esto me hacia estar en tensión gran parte de las clases y si ademas me tocaba con una compañera exigente era todavia peor. En ese momento entendia porque los novatos no quieren bailar con nosotros.

El año próximo si decido apuntarme a las clasese de Antonio, me apuntaré a un nivel bajo porque no se si el ritmo de mi vida es compatible con la dedicación que requiere el nivel de este año (si faltas dos semanas la has fastidiado), y como yo ya no voy a participar en Mira quien baila ni en ningun concurso, prefiero disfrutar de vosotros, alegremente y relajadamente. En pocas palabras no quiero saber 50 pasos de dos minutos cada uno, prefiero aprender técnica y hacer un paso básico bien hecho y con gracia, y no quiero parecer un bailarin ortopedico con una memoria de opositor. Me gustaría saber que opinión teneis vosotros porque he observado que empezamos muchos y al final ibamos pocas parejas a clase, y cuando veo bailar a la gente no veo hacer los pasos de Antonio (salvo honrosas excepciones que todos conocemos) y los que hacen los pasos les falla la técnica. En fín, creo que para el año que viene deberiamos ir un poco mas despacio y aprender a soltar nuestro cuerpo a que aflore lo que llevamos dentro y que cuando bailemos estemos realmente expresando sentimientos, se nos vea con cara de bailarines que nuestros movimientos fluyan de nosotros de forma natural y que cuando terminemos de bailar estemos realmente cansados y satisfechos por haber sacado de dentro lo mas natural de nosotros. Pero vaya por delante que Antonio me encanta. Un besazo para tod@s y espero vuestros comentarios.